Nuestro viaje con experiencias maravillosas continua:
Tras un largo viaje en autobús desde Camberra el 28 de enero buscamos un
hostal St. Kilda, en las cercanías de Melburne y junto a la playa.
Pensábamos descansar en la playa. Pero mira por donde!!! Los campeonatos de
tenis (Open) en Australia!!! Compramos entradas para el grupo en los bajos.
Tras una ducha fuimos a Road Laver Arena, otra cancha. Una sonrisita al
guardián hizo maravillas: pudimos entrar a sacar algunas fotos del complejo.
Maravilloso.
Seguidamente pasamos a otra cancha donde pudimos ver el partido de S.Kim y
C. Baal, posiblemente juveniles. Afuera había una gran pantalla, donde podía
verse todo lo que ocurre en las canchas del Main Arena. Nuestro grupo de
jóvenes no era fanático de tenis porque lo que no nos esperamos a la tarde
para ver el partido Roddick - Hewitt, pero el ambiente era agradable. Ingrid
se alegró de ver el partido en su habitación con los compañeros de grupo
Michelle y Paul: también así fué agradable.
Tras un día largo y deseos de ir a dormir, nos llama Michelle que había un
Possum en un árbol. Maravilloso!!, sin poder dar una explicación exacta de
animal, pero con un parecido a una ardilla. Paul y Ingrid se apresuraron a
la habitación a por las cámaras fotográficas. Lo llevamos en nuestro paquete
de recuerdos. Es fantástico ver los animales más diversos en su entorno
natural.
El 30 podíamos alquilar bicicletas gratuitamente y, como en Alemania,
estábamos obligados a llevar protector de cabeza (casco). Por supuesto es
difícil de conducir por la izquierda, pero así nos vamos entrenando por si
algún día compramos un coche. Fuimos a los Royal Botanic Gardens, donde
disfrutamos de bonitas plantas y flores, sobre todo de rosas tropicales por
las que en Holanda se paga mucho dinero. Aquí las encuentras al lado del
camino.
El 1 de febrero, tras un día de descanso, buscamos una ruta de paseo por la
ciudad en el Lonely Planet. Seguimos la ruta. Encuentro Melburne, asegura
Ingrid, una ciudad grande, sucia y maloliente. En cambio Camberra la más
bonita de las ciudades grandes. Interesante de ver es el contraste entre los
rascacielos y los edificios antiguos. Hemos visitado algunas iglesias pero
sobre todo la catedral St Patricks. Cuando ves un edificio tan grande e
imponente te preguntas cómo es posible!!! Lamentablemente en testos tiempos
ya no se edifican ese tipo de edificos.
Al final de la ruta llegamos a Fritzroy & Treasary Gardens. Un jardín
(parque) maravilloso. La escritora Ola Cohn vistió en 1932 el tronco de un
árbol con fairies: el Fairies Tree. Así llamó ella su libro. Encierra el
pensamiento de crear un lugar sin peligros en Melburne donde puedan jugar
los niños. Se creó un pequeño pueblo y un gran dragón, convertido en
tobogán. Aunque sea para niños los pasamos maravilloso.
Al día siguiente fuimos con tranvía, tren y autobús al Healesville
Sanctuary. También una especie de parque donde cuidan a todos los animales
que son víctimas del tráfico. Aquí tienen programas de procreación para las
especies que tienden a desaparecer, como el Platypus (ornitorinco).
Fantástico, a pesar de lo que llovía!. Según Rubén estuvo lloviendo a
cántaros todo el día, pero a la entrada del parque vendían ponchos de
plástico o se podían alquilar paraguas. La cara positiva de la medalla es
que como llovía tanto casi no había visitantes y tenían libertad para ver
todo en primera fila. Sobre todo cuando se trataba de shows con animales o
tomar contacto con los cuidadores de los animales. Acariciamos un Wombat de
6 meses. Su madre no sobrevivió un choque en el tráfico. También fué una
experiencia estar al lado de un walliby (especie de canguro pequeño) en el
momento que estaba comiendo. Todos los animales en el Healesville Sanctuary
son salvajes. Fantástico que existan tales organizaciones para los
animales!!!
También hemos tenido aquí la oportunidad de informarnos mucho sobre toda
clase de animales. Encontramos maravilloso ver los ornitorincos, pero
también los Bird of Prey. Un show no pudo tener lugar por la lluvia, pero
pudimos ver estos animales extraños de cerca.
También fué fantástico estar con los reptiles: serpientes y lagartos, el
plato fuerte de Rubén. En total estuvimos 5 horas disfrutando de este mundo
de animales exóticos. También hemos visto bonitos panoramas desde sobre el
valle Yarra, uno de los barrios más bonitos de la ciudad. Resumen del día en
Healesville Sanctuary: fantástico, maravilloso!!!
Nos disponemos a preparar el viaje de marcha a Nueva Zelanda que tendrá
lugar el 4 de febrero. Os pondremos al corriente. Ingrid se dispone a enviar
fotos, de las que saldrá una selección en próximas ediciones.
